Lo primero que se debe detener en cuenta es diseñar el menú, por tal motivo debemos contemplar varios aspectos fundamentales como el número de invitados, sus gustos y costumbres, tipo de celebración, presupuesto y la disponibilidad de los productos y alimentos que queremos utilizar.
Una vez elegido el menú, habrá que elaborar el orden de servicio de las comidas. Como reglas básicas debemos contemplar que los platos y sabores más suaves se sirven al principio y los platos más fuertes se sirven después. Por ejemplo, tomemos en cuenta que los caldos, consomés y pescados se sirven antes que las carnes.
También recordemos el apoyo de agencias de festejos o servicio de catering, los cuales siempre tienen personas calificadas para asesorarnos en detalles como el número de pasapalos por persona que se deben servir o las bebidas que deben acompañar la comida que se sirve en un festejo nocturno.